Estoy leyendo el libro del profesor Omar Rincón de Colombia: Los tele presidentes cerca del pueblo y lejos de la democracia.
Me gusta esa manera de ejemplificar nuestro modo de hacer política. La telenovela.
Parte de una hipótesis narrativa del hombre puro (los presidentes) que salva a la mujer equivocada ( el pueblo). Que hace un amor directo sin intermediarios, cercano y machista al pueblo que gracias a su baja autoestima, requiere de una atención especial y amorosa, cuyo resultado es que el pueblo le dice al hombre puro :" amado mio haz lo que quieras conmigo y con la nación, con tal de que me hagas feliz y, por favor, ni me cuentes que haces, no me molestes, confío en tí"...A ello le sigue el pacto melodramático en la que el presidente (hombre puro) abandona la política de los argumentos para ganar la emocionalidad del entretenimiento y prometer felicidad. El tercer pacto es la promesa de la felicidad y con ella el amor eterno, la reelección infinita. El final tarda pero está claro que el galán luchará....
Es una historia de amor político se hace para y desde los medios de comunicación visuales y orales no escritos, pues los tele-presidentes la palabra escrita es su terror, con ella quedará marcada la prueba del simulacro y la mentira.